Por Gustavo Adolfo Becerra
En esa ola del Mar Caspio, en la única
ola de Mar que puedo reconocer
(de todas las olas de Mar que existen),
viene el Álbum familiar de Fotografías B/N
y el sonido azul de tus manos
sobre la Mesa, que nunca /terminé de sentir.
Podrían desaparecer tus manos, incluso
la mesa, pero seguirán estando ahí.
En esa misma Nube-Contención / todo
se ha disipado. La Materia ha perdido
peso y estatura. Pétalos de Rosas llovieron
sobre mis Hombros y los tuyos / y quizás
no lo supiste: el tiempo me ha llevado
hacia lugares de los cuales no saldré
vivo. Tampoco podemos eludir nuestra
responsabilidad en ese Encuentro.
Jardín-Negro a Escala. Y en esos sombríos
universos, consagro escritos y oraciones.
Sobre los Océanos de la Mansedumbre
navegan Buques-Cabeza de Cabra, buques
orientados al Transporte de Animales,
cargados con Lamentos, Verdades , Principios.
Aplicado a la Navegación la brea,
el Cerote-Tótem en la Juntura de los Dioses
cumple con su Oficio de Empapelamiento:
rasgado el Traje del Templo la acción
se traslada a la Quinta Plaza de Juegos.
Los Espíritus vuelven a protegerse
y se hablan al oído, mientras ruedan
las cabezas de los Ídolos-Pies de Barro.
Oteo el Aire como Lobo calzado
y escucho el mugido / mordido
entre los Dientes del Bosque, del Libro
sin Escritura que ahora se despliega
como una muchacha Viuda de sí misma.
Tú que has mantenido el Aire en la cornisa
canta este mugham – me dicen.
Somos Rostros Alados de una Vida
que se perfecciona (que vivió y vive), incluso
remedia los Hilos, refuerza Estructuras
y limpia con su Polen. Masa y energía
re-inventándose hasta el suspiro
universal. Los hombres-libros
se han escondido en las cuatro
verticales (y quizás fuiste uno de ellos).
Virtuosa sea la Correlación y el Relato:
todo ha sido memorizado. Proyects:
el silencio se pasea desnudo. Deja huella.
sobre la Playa de Aguas Invisibles. Nos habitan
otros Universos. Los hombres-libros
bebían agua de piedra y comían
aire de densidad harinosa / y efímera.
Perfeccionaron el silencio de la Materia
mientras los árboles flotaban. Fumaron lirios
secos en Tiempos de Cazería. Los Hombres-Libros
dejaron su Herencia a la Memoria Expandida
en quince volúmenes, que un día se desplegarán
hacia los Cuatro Norte de la Botánica.
Simples Ejercicios de Marinería pobre:
silenciosos sus cuerpos caminan
sobre el Agua. Cientos de siluetas
cruzan el Océano. Cargan en su Espalda
cruces, deuteronomios y lápices labiales.
Niña, has quedado a la intemperie:
descalza de estos prodigios y alucinaciones.
Los Sitios Uterinos ya no están a tu alcance.
Cae desde Kavkazskiy Khrebet la Noche
setífera. El Gusano de Seda crea su Vía Láctea
por la cual navegará por los Siglos.
Lleno de Orugas: siete fases de muda y el viento
inflama la libertad. También la disolución
de flema y alivio de espasmos. Me asomo
al mundo: las crisálidas comienzan a moverse,
olor a algodón y tabaco viene de las biomas.
Sobre terrazos de cultivo: lino, sésamo y ricino
y el Arco-Iris que se desprende de tus Ojos.
Y se va de tus Ojos, dejando palabras sin decir
y recuerdos sin vivir. Una Colina que sólo
se Enrojece con el Sol me espera con los Brazos
Abiertos. Mañana saldremos a la Caza del Esturión
beluga. Humean las Viejas Casas
a orillas del Monte / donde los Abuelos
aprendieron el Síntoma y la Pérdida. El río Kubán
comienza su Trabajo y canta. Alza ahora su voz
para que lo escuche. Y vibro en sus humedales.
Aletean en la distancia más gris los Pájaros
anticipatorios de la Muerte. Y la mujer
vestida de Humo / sopla las Maderas
para que no entre la Polilla
ni la Bacteria a la leguminosa. Renuevo
contigo este Pacto Sagrado. El Convoy
de los Deportados vuelve a partir. El último
recuerdo que mantengo es la mano
que se despide: un Pañuelo Blanco que se Mancha.
Se triza y se mancha. Se mancha y sangra.
Ese Rumiar de venas, tristeza y rabia
muerde. Ese rumiar es la misma
locomotora que se apaga. Recordarás
ese momento durante toda la Vida:
cuando vayas en lancha, o esperes
en un aeropuerto o salgas a pasear en caballo.
Los que se han ido / se han ido para siempre
y en su lugar sólo el recuerdo del convoy
alejándose, /llenando de trigales
o humo la páginas en blanco / quemándolas
y rehaciéndolas en una eternidad
que dura dos segundos de lectura.
Erevan- digo- y todo se llena de silencio.
Todo es silencio en la Región de Hierba-Corta
en Nagorno-Karabaj. También los tabacales,
los Ingenios de Algodón y los Mercados
de Pájaros capped wheatear Vivos, se llenan
de este Silencio: espeso, metálico,
ensordecedor. Me cubro del Sol bajo las Alas
de los que se fueron antes / por estos
bosques de Hayas, Nogales y Arces.
Somos de ese Ahí. Toda nuestra Sangre
circula en ese ahí: descubierto y con manos
limpias, el cielo protege a quienes te buscamos.
Aquí yace nuestro ahí, junto a nuestros
instrumentos de Labranza / que escriben
cartas para el Invierno herbáceo
que ahora se pasea en Paños Menores
por los Cementerios de nuestros Parientes.
Este es nuestro ahí: la seguridad materna
adosaba al muro común, la Música
modal con largos /espacios de ornamentación
recorriendo las Campiñas que florecerán
aunque nosotros ya no estemos en estos juncos.
Sonidos de kamancha y laúd al fondo del pozo
sólo para tú me escuches, herida miel,
golpeteo el daf-pandero con Codo y Puño.
Comportimos el Cuidado del Nido,
mientras caminamos descalzos hacia Ararat.
Tres lunas: una menguante, dos llenas. Otra.
Semana de Luna quemada en la Mejilla,
curada con Alcohol de destripar corderos.
Deshollados de Pies / no hay Otro sino éste.
Somos Hijos y Nietos de abducción
violenta. Pastorea tus hambres en esa Travesía
humana. Los azerí cuidan sus rebaños de cabras.
Palabras como rebaños nubosos. Y en esos rebaños
escriben sus Poemas / como con Fuego.
Comamos acibadem kurabiyesi[1] y caviar
de esturiones. No estamos lejos. Escucho
rumiar el Vientre de la Madre. Quizás
espera con Carne sasonada con fenugreek ,
comino, ajo, papricka picante. Quizás
nunca estuvo habitando / donde la Imaginamos.
Bebamos, hermana mía, hasta que el amanecer
se nos caiga de los Ojos. Bebamos
aki y ouso[2]. Otras son las Olas del Mar
de Marmara. El otomano lava sus dientes
con Cenizas. Hermana mía que bailas
en el harem turco, baila conmigo
esta noche de puñales. Baila en mi harem
de Sembrador de Nubes y cocinero de atardeceres.
Con cortes en la Cara y en las Piernas,
pero hermosa como una Ventana de Prisionero,
baila sobre estos cristales / apagados,
sobre los Manteles bordados / antes que el hambre
te quite los oficios. Repara diques
antes que el Agua te convierta en Arena.
Entre Cuatro Verticales la Sombra
aumenta su caudal, hasta el cúlmine.
Podría decir a mi favor que escuchaba Voces
que me resultaban imposibles
de traducir, aún en noches estrelladas.
Escribo Labio y el Horizonte se Expande.
Ningún Equilibrio tiene la Porcelana Rota.
Quizás, a cada Raíz le corresponde una Primavera.
Tomó el Bus de las 11:00. Es lo último que supe.
Gustavo: me gustan los hombres-libros, y las raices con primavera, hubo una a la que nunca le alcanzo la primavera…aunque la botanica sigue. Un dia tendras que hablar de tu poesia, de su hechura, y todo eso. Un abrazo
Eugenia Toledo
Gustavo: me gustan los hombres-libros, y las raices con primavera, hubo una a la que nunca le alcanzo la primavera…aunque la botanica sigue. Un dia tendras que hablar de tu poesia, de su hechura, y todo eso. Un abrazo
Eugenia Toledo